El otro día, mientras esperaba a una amiga con la que había quedado, empecé a leer
Autobiografía de Alice B. Toklas en la cafetería de La Central, que igual no es el mejor sitio para leer debido a la cantidad de gente que hay, pero al menos estás rodeada de libros. El caso es que nada más comenzar me acordé de otro libro que leí este mismo verano pasado,
¿Qué estás mirando?: 150 años de arte contemporáneo, y gracias al cual creo que conocí de verdad la figura de Gertrude Stein, más allá de ser alguien que aparecía en un cuadro de Picasso y más allá ser un personaje más de
Midnight in Paris. Y otra vez volví a pensar en lo mucho que me hubiera gustado vivir en esa época –y en París, claro– y haber podido asistir a una de esas cenas en las que se juntaban tantos artistas.
Quiero creer que a lo mejor en una vida anterior estuve allí y, quién sabe, quizá fui Hélène, la cocinera de Gertrude Stein.