22 de septiembre de 2015

Llevo un tiempo queriendo escribir sobre la tristeza. Sobre el nudo en la garganta, sobre las ganas de llorar a todas horas, pero me he dado cuenta de que realmente no sé muy bien qué decir. Que está ahí. Que a veces no me deja dormir al mismo tiempo que no me deja salir de la cama. Que me hace querer que acabe todo pero que también empiece o que al menos vuelva al principio, a como estaba todo antes. No sé muy bien a qué me refiero con «todo» ni con «antes». Me refiero, supongo a algo que en algún momento tiene alguna gente. Lo que sea que les haga tragar el nudo, secarse las lágrimas, esperar el metro en el andén sin pensar en otra cosa que no sea cogerlo cuando llegue. No sé, eso.